Ante el ataque abolicionista que quiere hacer retroceder las recomendaciones de las Naciones Unidas para la regulación del trabajo sexual, Redtrasex lanza una Campaña Regional desde change.org en apoyo a la regulación de nuestra actividad como una forma de garantizar nuestros derechos. Sumate aquí!
Las recomendaciones de Naciones Unidas para proteger los derechos humanos de poblaciones vulnerables están siendo atacadas por una campaña internacional abolicionista que confunde el trabajo sexual con la trata. Las investigaciones han demostrado que la regulación del trabajo sexual es una de las medidas que ayudarían a disminuir la violación de derechos y colaboraría en la prevención del VIH.
Estos ataques abolicionistas intentan hacer retroceder el trabajo realizado entre estos Organismos y las trabajadoras sexuales de distintas partes del mundo en pos del reconocimiento de nuestros derechos. Buscamos tu apoyo para que no se modifiquen estas valiosas investigaciones.
Somos mujeres adultas -mayores de 18 años- que ejercemos el trabajo sexual como una decisión propia. Nuestro trabajo es estigmatizado socialmente y por eso nos discriminan. Pero tenemos claro que somos sujetas de derechos, al igual que cualquier otro/a trabajador/a y luchamos por tener garantizado el acceso a la salud, el trabajo y la justicia.
Como trabajadoras sexuales nos vemos expuestas a una marginalidad que se traduce en los constantes abusos y actos de violencia que se cometen contra nosotras. Vivimos la violencia de las fuerzas policiales que nos detienen en la calle brutalmente, el maltrato del personal de salud que muchas veces nos atiende de forma discriminatoria, la violencia institucional que no sólo no nos protege sino que nos estigmatiza como focos infecciosos de ITS (lo cual se traduce en exámenes compulsivos de VIH y en prohibiciones para trabajar si somos seropositivas) y en la persecución a nuestros clientes, sólo por mencionar alguno de los maltratos que cotidianamente acompañan nuestra actividad.
La regulación del trabajo sexual es la respuesta que exigimos a los Estados para disminuir la vulnerabilidad de las trabajadoras sexuales y no quedar expuestas ante mafias que viven de la explotación sexual, el estigma y la discriminación social, la violencia institucional y policial, la falta de buenas prácticas de atención médica acorde a nuestra actividad y ante el VIH.
Las recomendaciones de las Naciones Unidas surgen del trabajo entre académicos, investigadores y las poblaciones involucradas y son sumamente valiosas para que nuestros países trabajen en la promoción de políticas públicas que protejan nuestra actividad.
¡Apoyá estas recomendaciones para que, de una vez por todas, la regulación del trabajo sexual sea un hecho!
Dejá tu firma en: CHANCE.ORG
Seguí la campaña en twitter: @Redtrasex
#regulaciondeltrabajosexualya!