La trabajadora sexual no comete delito

Fecha

Mas
articULOS

El ex-fiscal boliviano Joadel Bravo opina sobre el trabajo sexual


Compartimos esta editorial escrita por Joadel Bravo, ex-fiscal boliviano y publicada en el diario El Deber de Bolivia.

El proxeneta es aquella persona que facilita el acceso carnal hacia otra, es el puente que hay entre los (as) que se prostituyen y la gente que quiere pagar para obtener relaciones sexuales.

Pero en el caso del funcionamiento de este tipo de alojamientos, se puede observar que existen elementos suficientes para ver que hay una organización criminal, que es un delito de mayor gravedad que la asociación delictuosa.

Al parecer, los funcionarios de estos locales están enterados del tema, por lo que se puede deducir que hay más de un involucrado.

Que se comercie con sexo en estos lugares es algo insospechado, es un muy buen disfraz y un aspecto muy conveniente para los proxenetas. Se puede prestar para que haya trata de personas.

La mujer que decide ser una trabajadora sexual no comete ningún delito, el que lo hace es el hombre o la mujer que lucra con el trabajo de ellas y se convierte en un proxeneta, cafisho o ‘alcahuete’, como algunos lo llaman. Este es un problema cuya raíz está en la banalidad que se vive en nuestra sociedad

Scroll al inicio
Abrir chat
1
Escanea el código
Hola
¿En qué podemos ayudarte?