Somos Trabajadoras Sexuales organizadas, llevando a cabo acciones urgentes ante los Estados ausentes.

Las consecuencias nefastas que genera la falta de regulación de nuestro trabajo se están dejando ver crudamente ahora, en medio de la crisis que el mundo entero está atravesando en este momento a causa de la epidemia del Coronavirus, la cual ha sometido a una gran cantidad de países de Latinoamérica y el Caribe a extensos periodos de cuarentena para la población.

En este momento en el que el sistema deja ver su lado menos atendido, y los Estados no tienen forma de dar respuesta a la totalidad de su población, es cuando más fuerte llueve abajo de la intemperie en la que estamos las Trabajadoras Sexuales de la región.

Durante las últimas semanas las cuarentenas decretadas nos han puesto en frágiles condiciones de vulnerabilidad, debido al confinamiento de la población en los hogares y a que nuestra economía es la que surge del trabajo del día a día y con nuestro cuerpo como herramienta. Ese es el panorama que estamos viviendo, mientras tanto, el silencio de los gobiernos.

Pero nos tenemos a nosotras, una vez más y como siempre, juntas le estamos haciendo frente a la adversidad. Es por eso que en varios países de la región nos hemos organizado y hemos adelantado campañas de colaboración, tejiendo redes entre nosotras, organizaciones, aliadxs y vecinxs, hemos convocado el acopio de donaciones de alimentos y de útiles de aseo e higiene, para luego distribuirlos entre las compañeras que más los necesitan.

Las Organizaciones Nacionales de Trabajadoras Sexuales en Chile, Colombia, Paraguay, Argentina y México se han organizado en función de las compañeras que más afectadas se están viendo en estos momentos, en los que muchas de nosotras no estamos pudiendo llevar la comida a la mesa de nuestras familias.

A pesar del difícil contexto que como humanidad estamos atravesando, nos sentimos profundamente orgullosas de nuestras compañeras, que a lo largo del mundo y de Latinoamérica se están movilizando. Ese es el espíritu de nuestro movimiento y de nuestra lucha, y el que dio nacimiento hace 22 años a esta Red: un movimiento de Trabajadoras Sexuales, para Trabajadoras Sexuales.

El Trabajo Sexual no sólo es nuestro oficio y nuestro trabajo, también es nuestra escuela, y es entre nosotras que tejemos redes y nos tendemos la mano, y no vamos a detenernos mientras la injusticia siga dejando su huella en nuestras vidas.

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