Es indispensable incrementar las acciones tendientes a reducir los prejuicios, la violencia, el estigma y la discriminación vinculados con el VIH/sida, contra las personas que viven con VIH y las poblaciones clave (gays y otros hombres que tienen relaciones sexuales con hombres, trabajadoras/es sexuales, personas trans, usuarios de drogas, personas privadas de libertad, mujeres, niñas y personas que viven con VIH/sida) y poblaciones vulnerables.
En la ciudad de Rio de Janeiro, Brasil, se llevó a cabo el Segundo Foro Latinoamericano y del Caribe sobre el Continuo de Atención: “Mejorar la prevención combinada del VIH para fortalecer el continuo de la prevención y la atención” donde se discutieron temas relacionados con la prevención combinada del VIH y la reducción del estigma y discriminación como componentes esenciales para fortalecer lo ya acordado en la región sobre el continuo de la prevención y la atención.
Compromisos alineados con la reducción del número de nuevas infecciones del VIH que propone la Acción Acelerada (Fast Track) del ONUSIDA para el 2020, así como también, para terminar con el sida como un problema de salud pública para 2030.
Participaron en el Foro más de 150 representantes de los programas de VIH/sida de la región; redes y organizaciones de la sociedad civil; poblaciones clave y más afectadas por la epidemia; personas viviendo con VIH; comunidades académicas y científicas; programas, agencias de las Naciones Unidas; organismos internacionales y cooperantes bilaterales.
Las y los participantes consideraron positivos los logros alcanzados en materia de detección, vinculación rápida a servicios de tratamiento y supresión viral. Sin embargo, la expansión y sostenibilidad de las acciones de acceso a tratamiento pueden verse afectadas, sin los adecuados recursos para el incremento de la oferta de servicios, como si no hay un descenso significativo en el número de nuevas infecciones de VIH en el corto plazo. Mientras que en el Caribe la tendencia de la incidencia anual muestra un descenso pronunciado, en América Latina la caída en la incidencia parece ser menos marcada.
Ha habido grandes avances para aumentar la disponibilidad de las pruebas de VIH. Sin embargo, poco se ha avanzado en el logro de un diagnóstico y tratamiento más temprano de las personas viviendo con VIH. Se deben implementar a mayor escala las acciones de prevención primaria, con intervenciones focalizadas a las poblaciones en mayor riesgo, a fin de lograr una reducción sostenida y drástica en el número de nuevas infecciones de VIH anuales. Para el logro de las metas será necesario disminuir el número de nuevas infecciones al menos un 75% para el año 2020, y una reducción de un 90% al 2030.
Elena Reynaga, secretaria Ejecutiva de la RedTraSex participó de las deliberaciones y firmó, a nombre de la Red, el Llamado a la Acción que se puede leer a continuación.