En talleres de sensibilización señalamos los casos de violaciones que hemos sufrido las trabajadoras sexuales por parte de la Policía. Compromiso conjunto para continuar con estas actividades.
Para terminar con el estigma y la discriminación que padecemos las trabajadoras sexuales, desde la Red de Mujeres Trabajadoras Sexuales de Honduras desarrollamos jornadas de sensibilización con representantes de la Policía.
En las ciudades de Tegucigalpa, Choluteca, San Pedro Sula y La Ceiba estuvimos trabajando en el fortalecimiento nuestra alianza con el Comisionado Nacional de Derechos Humanos (CONADEH) a través del proyecto “La Promoción de la salud con énfasis en VIH SIDA”. Participaron 219 policías, entre ellos 150 de Tegucigalpa, y un promedio de tres representantes de la policía de 12 municipios aledaños a las ciudades de San Pedro Sula y la Ceiba.
En estos encuentros socializamos por qué y para qué nació la organización y a qué nos referimos cuando hablamos de trabajo sexual. De igual forma señalamos los casos de violaciones que hemos sufrido las trabajadoras sexuales por parte de algunos miembros de esta instancia.
Creemos que la autoridad debe de ser uno de nuestros principales aliados en la búsqueda de la reivindicación de nuestros derechos como mujeres. En ese sentido, hicimos partícipes a los policías de la coordinación que estamos desarrollando con el Centro de Investigación y Promoción de los Derechos Humanos (CIPRODEH) para la construcción de protocolos policiales.
Señalamos que este tipo de eventos deben desarrollarse en todas las estaciones de policía a nivel nacional para que se disminuya el nivel de estigma y discriminación dirigido hacia las mujeres trabajadoras sexuales (MTS). Las y los participantes se comprometieron en ser efecto multiplicador con sus compañeros y compañeras y ya recibimos solicitudes de comisionados y jefaturas para desarrollar este tipo de encuentros con el personal a su cargo.
Como MTS deseamos que disminuya el nivel de discriminación y estigma por parte de la policía hacia nosotras ya que esto ha influido negativamente para que nuestras compañeras no acudan a interponer denuncias ante las instancias respectivas. La experiencia nos está demostrando lo importante que es estar organizadas para la defensa de nuestros derechos.