Conmemoramos el Día de las Trabajadoras Sexuales porque el 2 de junio de 1975 numerosas trabajadoras sexuales de Lyon, en Francia, ocuparon la Iglesia de Saint-Nizier exigiendo que se respeten sus vidas, sus cuerpos y su trabajo.

Hoy, 44 años después y en todas las partes del mundo, las trabajadoras sexuales seguimos exigiendo el reconocimiento integral de nuestros derechos humanos, laborales, sociales y económicos.

Porque los Estados, al no sancionar leyes que nos garanticen nuestros derechos, nos someten a la clandestinidad, la ilegalidad y la persecución policial y judicial. Y esto fomenta la discriminación y el estigma sociales.

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Como cada año, exigimos la sanción de una Ley de Trabajo Sexual que respete nuestras vidas, nuestros cuerpos y nuestro trabajo. Porque elegimos ser trabajadoras sexuales en el ejercicio de la autonomía que tenemos sobre nuestro cuerpo. Nuestra decisión tiene que ser respetada y para eso debemos contar con un marco regulatorio que reconozca derechos y establezca obligaciones para nuestra actividad.

Las trabajadoras sexuales exigimos #LeydeTrabajoSexualYA

*Los datos corresponden al Informe sobre Violencia Institucional (RedTraSex 2016) y al Informe sobre Estigma y Discriminación en el sistema de salud (RedTraSex 2013).